Intereses Compuestos

En palabras simples, los intereses compuestos son aquellos que se van acumulando junto con el capital inicial, ya sea en una inversión o en un préstamo; por ello el qué tan bueno o malo es, dependerá del lado en que te encuentres.

¿Cómo funcionan los intereses compuestos?

Por ejemplo, hablando de inversiones, tú puedes tener una inversión de $100,000, de la cuál en 1 año, generaste un 10 % de interés, es decir, tu capital ahora es de $110,000; el siguiente año de igual manera generas un interés del 10 %, pero ahora de un capital de $110,000, lo que al final te dará un capital de $121,000 y así sucesivamente.

Ahora, en lo que respecta a los créditos hipotecarios, lo que sucede es que dependiendo de las características de tu préstamo puedes pagar intereses compuestos, lo que significa que en vez de aumentar ese interés a una ganancia, se estará aumentando a una deuda; esto sucede cuando no se liquida el total de tu pago mensual, pues incrementa al total de tu deuda con los intereses que se generan al no cubrir el pago acordado, haciendo que al final tu deuda se pueda multiplicar.

Te recomendamos revisar muy bien el tipo de interés de tu crédito hipotecario, así como renegociar tu deuda en caso de que no puedas cubrir los pagos mensuales, para evitar que pagues de más.